Mientras los papeles de mi expediente vuelan rumbo a Honduras después de un proceso de valoración muy positivo, y después de dar muchas vuelta a la conveniencia o no de escribir un blog acerca de mi proceso de adopción, he decidido dejar a un lado mis dudas (la principal, el derecho a la intimidad de un menor), y echar para adelante con el. A ver que tal me va.
Mi proceso adoptivo es un poco distinto a lo “normal”. Así que he pensado que a lo mejor contando mi historia, y la que será la historia de mi futuro hijo puedo quitar algunos miedos sobre el tema este de la adopción por las llamadas “necesidades especiales”. El tema de la intimidad del menor es algo que, de momento, dejaré para más adelante. Ya veré la manera de solventarlo en la manera de lo posible cuando llegue el momento
¿Qué porque mi proceso es algo distinto? Cada persona o personas acaban en esta maternidad-paternidad por distintos motivos, unos igual de validos que otros. Pero todos tenemos un punto en común. TODOS queremos ser padres.
En mi caso me salgo un poco de la media de edad (cuando empecé tenia 30 años), soy soltera y teóricamente fértil (esto no es tan raro) y solicito adopción por “necesidades especiales” en un país que solo asigna una pequeña cantidad de niños a adopción internacional, Honduras (además de intentarlo por vía nacional donde todavía lo tengo mas negro). En mi caso, en Aragón hace mas de 7 años que nadie ha presentado una solicitud de adopción en este pais (de todas maneras, hasta que no tenga mi expediente en el IHNFA no me lo voy a creer)
¿Por qué Honduras? Yo siempre pensé que el país de nacimiento de mi hijo tenía que significar algo para mí. En mi caso, por motivos que no vienen al caso, tengo un vínculo sentimental con gente de ese país, siempre lo he tenido un poco metido en mi corazón. Así que investigué sobre si podía optar a adoptar un menor de 0-3 años siendo soltera y sobre la transparencia y legalidad del proceso. Como me gustó lo que vi (dentro de lo que cabe) me decidí. Ahora solo espero que todo siga adelante, no me echen para atras el expediente y tenga que recurrir a la adopción en otro pais.
Cierto es que los plazos de espera que en la actualidad están dando son 5-6 años para el rango 0-3 si lo quisiera sano. Como mi opción es, textualmente, “acepta minusvalías físicas, sensoriales o enfermedades leves”, la espera puede reducirse algo aunque nadie asegura nada. Todo depende de las patologías que acepten las familias que están por delante de mí y de las patologías que tengan los niños “disponibles” (que palabra más fea). Yo de momento no tengo prisa. Como le dije el otro día a mi abogada: ojala mi hijo tarde mucho en llegar, eso solo quiere decir que, o bien las familias que están por delante abren sus brazos a estos niños o bien no hay niños con “mis” patologías leves. Me mata la idea de que un niño no salga en adopción por cosas tan asumibles como los pies zambos, por ejemplo
Sobre el tema este de la valoración quería contar que, en mi caso fue muy positivo. El curso de preparación me pareció muy educativo e interesante (a la vez que duro en algunos momentos), las dos personas que me valoraron para la idoneidad fueron estupendas. En ningún momento me sentí criticada, ni agredida, sino todo lo contrario. Me dieron confianza y pude hablar sin tapujos y con sinceridad, sin “miedo” a que malinterpretaran mis palabras. Incluso puedo decir que me sirvió de ayuda el poder expresar mis pensamientos en voz alta. El inconveniente que tiene el recurrir a la adopción siendo soltera es que no tienes a nadie con quien compartir el proceso. Cierto es que puedes hablar, que unos te entienden y otros no, pero no caminan a tu lado.
Luego estuvo el tema de papeleo.
Al ir por protocolo publico y a un país con poca experiencia, pues me tuve que apañar bastante con todo el tema de legalizaciones. Unos me decían una cosa y otros otra. La gran duda era el “donde” tenía que ir a apostillar uno u otro documento. Menos mal que existe un foro de adoptantes en Honduras y las personas que alli estaban me fueron informando de todo. Una vez todo apostillado lo mandé al Consulado de Honduras en Madrid donde me atendieron MARAVILLOSAMENTE y con una gran amabilidad.
Ya hace 3 semanas lo presenté al IASS así que imagino que en estos momentos “vuela” hacia Honduras donde llegara a finales de Abril. Mi abogada ya está avisada así que ahora solo me hace falta esperar
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